Ficha técnica:

Ciudad de Logroño: Markelau, David Cadarso (4,3p), El Korchi (6), Preciado (2), Javi Rodríguez (4), Palomino (3), Jorge Clavijo (p), Rubiño (2), Eduardo Ortiz (3), Javi García (2), Keita (1), Da Silva y Eduardo Cadarso. 

Benidorm: Roberto Rodríguez (p), Vujovic (1), Bernatonis (4), Vainstein (3), Iker Serrano, Darío Moscariello (1), Santos (2), Samuel Ibáñez (p), Barceló (2), Hernández (1), Sempere (2), Ramiro Martínez (2, 1p), Iván Rodríguez, Edu Calle (4) y Nikcevic.

Árbitros: Jesús y Jorge Escudero. Excluyeron a Da Silva y a los visitantes Barceló, Vainstein y Nikcevic.

Parciales: 3-3, 3-6, 6-7, 9-10, 13-10, 14-13 (descanso); 16-14, 18-17, 19-18, 22-18, 25-20 y 27-22.

Incidencias: unos 1.800 espectadores.

El Ciudad de Logroño sumó un claro triunfo ante el Benidorm por 27-22 con lo que mantiene el quinto puesto de la Asobal, tras un partido en el que su continuidad en el juego le permitió superar a un rival que tuvo buenos minutos pero que en el segundo tiempo pasó por un 'bajón' en ataque que le sentenció.

Aunque el Benidorm hizo un esfuerzo notable en muchos momentos, en el segundo tiempo le faltó aire y tampoco supo parar el partido cuando peor se encontraba; al revés, se precipitó y eso le llevó a perder.

La dos mitades del partido fueron, por lo demás, parecidas; porque ya en el primer tiempo el Benidorm fue ambicioso y trató de jugar sus bazas en la parte inicial, ante un Logroño más frío. De hecho, las paradas de Markelau fueron lo que permitieron a los riojanos no llevarse un disgusto mayor que el 3-6 que reflejaba el marcador cerca del minuto 10.

Pero entonces el equipo de Velasco dio un acelerón y en pocos minutos empezó a mandar en el marcador, hasta un 14-10 que hundió mentalmente al Benidorm. Los visitantes reaccionaron antes del descanso (14-13).

De nuevo en la reanudación el Benidorm luchó con todas sus armas y aunque los riojanos mantuvieron una renta de dos goles varios minutos, los levantinos consiguieron igualar el choque a 16 goles. Fue su último buen momento. En los siguientes minutos se juntaron sus propios errores, la mayor intensidad defensiva riojana y el mayor ritmo de los locales para dejar sentenciado el partido (22-18, minuto 50).

El Benidorm, que había marcado dos goles en 13 minutos, ya no reaccionó y se conformó con ver como el Ciudad de Logroño sumaba un nuevo triunfo.