Cuando Daniel García (Albelda de Iregua, 1982) y Yayun Gao (Xiamen, 1983) se conocieron en China en 2013 no imaginaban que acabarían abriendo su propia academia de chino en Logroño. Él aterrizó allí, procedente del mundo de las telecomunicaciones y con interés por la cultura asiática, tras conocer a un hombre chino realizando el Camino de Santiago. Por su parte, ella es profesora universitaria de chino para extranjeros y allí también estudiaba español.

Tras surgir el amor y viajar a España, por circunstancias de la vida, ella empezó a dar clases de su idioma en un merendero familiar de Albelda. Pronto, fue tal el éxito que optaron por alquilar aulas en una academia hasta que en 2017 abrieron una propia. «Al principio en un piso de dos salas en avenida de la Paz y después, con 50 alumnos, buscamos locales hasta encontrar este en Avenida Solidaridad 55 que reformamos nosotros mismos», explica García.

Aunque han ofrecido cursos de cultura y cocina china en diferentes espacios, incluido un curso de verano en la Universidad de La Rioja, en esta academia enseñan el lenguaje chino. «Aprendiendo el lenguaje te sumerges en su cultura porque el chino tiene 4.000 años, es un lenguaje primitivo, y se ha mantenido prácticamente invariable desde entonces, no se conjugan los verbos, no se distingue el género ni el número y es sencillo. Tanto, que si dicen que el inglés se puede hablar con mil palabras en el chino bastan quinientas».

Yayun Gao cuenta actualmente con 115 alumnos en su academia. - Foto: Óscar Solorzano

Actualmente, combinan el formato de clases presenciales con clases online, que empezaron con la pandemia con gran éxito, y trabajan en una plataforma de educación virtual con juegos y ejercicios. Además, son un centro examinador oficial. «Lo bueno del chino es que con un nivel B2 te contratan en cualquier empresa, cuando en el inglés necesitas un nivel superior».

Entre sus 115 alumnos cuentan con niños chinos que quieren aprender la gramática de su propio idioma, gente residente en otros lugares ,a distancia, y quienes acuden habitualmente a la academia.