Tráfico pone más de mil multas al año por ir sin cinturón

G. Basurto
-

El número de sanciones cayó hasta 486 en 2018 y ha ido creciendo hasta 1.134 el pasado año. Uno de los 9 fallecidos en accidentes en 2023 circulaba sin abrochárselo

Una de las seis cámaras de control del cinturón de seguridad, en la circunvalación de Logroño, a la altura de La Portalada. - Foto: Ingrid

les de conductores se ponen al volante cada año en La Rioja sin cumplir de forma instintiva con el 'clic' característico de abrocharse el cinturón de seguridad, a pesar de que es un gesto obligatorio desde hace casi medio siglo. Lo evidencia la estadística sancionadora de la Jefatura Provincial de Tráfico, que permite comprobar que lejos de mejorar la concienciación sobre la utilización de este elemento de seguridad que salva vidas, ha ido aumentando desde 2018. El pasado año, los agentes de la Guardia Civil y las seis cámaras de visión artificial operativas en distintas carreteras riojanas impusieron 1.134 sanciones a conductores que no utilizaban (ellos o pasajeros del vehículo) este elemento de retención.

Esa cifra supone solo 29 multas más que en 2022, pero 648 más que las registradas en 2018, un año en el que se consiguió rebajar notablemente el número de incumplimientos a 486, y a partir de ese momento las multas no han dejado de crecer. Bien es cierto que fue en 2013 cuando se alcanzó el mayor número de sanciones (1.611) en toda la década, pero que en 10 años la conciencia ciudadana haya mejorado 'solo' en 477 sanciones menos al año choca cuando todos los estudios técnicos demuestran que el cinturón de seguridad salva muchas vidas en caso de accidente.

La vida en juego. «Lo de menos es la multa; lo peor es que seguimos viendo que en accidentes con víctimas hay personas que no llevaban el cinturón de seguridad puesto y muchas veces ese hecho resulta clave en el desenlace del siniestro», explica a El Día de La Rioja la jefa provincial de Tráfico en La Rioja, Beatriz Zúñiga. La responsable de la DGT apunta datos preocupantes: Se estima que en La Rioja, entre el 25% y el 30% de personas afectadas en accidentes con heridos graves o fallecidos no usaban el cinturón. De los 9 muertos en 2023 en las carreteras riojanas que tenían que hacer uso del cinturón de seguridad ya que circulaban en coches y furgonetas (los otros 2 fallecidos hasta un total de 11 eran motoristas), uno circulaba sin habérselo abrochado, como tampoco lo llevaban puesto cuatro de los heridos graves.

200 euros y 4 puntos de carné

La utilidad del cinturón de seguridad en la conducción a la hora de reducir la gravedad de los daños en caso de accidente o incluso salvar la vida de una persona está fuera de toda duda. Lo apunta taxativamente la Dirección General de Tráfico en su página web: «El cinturón es el elemento más importante para la seguridad pasiva porque es el único freno del cuerpo en caso de impacto, tanto para el conductor como para el resto de pasajeros, tanto en los asientos delanteros como traseros». El uso de este elemento de retención es obligatorio en España desde el año 1975, cuando se impuso su utilización para los asientos delanteros. Hubo que esperar hasta 1992 para entrase en vigor para los traseros. No usarlo constituye una infracción que la DGT considera grave y que está penalizada con 200 euros de multa y con la pérdida de 4 puntos en el carné si se trata del conductor.

 

El 'gran hermano' vigila con seis cámaras

Además de las sanciones que imponen los agentes de la Guardia Civil de Tráfico, seis cámaras de visión artificial instaladas en carreteras riojanas por la DGT toman imagenes de los vehículos que circulan bajo ellas y multan a conductores y ocupantes que no hacen uso del cinturón de seguridad. Están instaladas en los siguientes puntos.

A-13. Es el tramo de autovía que va de Logroño hacia Viana. La cámara está en el kiló- metro 2,48, cerca del puente sobre el Ebro, en el tramo entre el Centro Comercial Berceo y el polígono Cantabria.

AP-68 En el autopista VascoAragonesa (AP-68) hay dos cá- maras que controlan el uso del cinturón de seguridad, ambos en Lardero, en los kilómetros 126 (a la altura del polígono La Variante y el Monte la Pila), y el 129 (entre el puente de Avenida Madrid y el peaje).

LO-20 En la circunvalación de Logroño hay dos cámaras: en el kilómetro 4,1 (a la altura del polígono La Portalada, cerca del acceso desde la calle Circunde) y el 15, en la bajada a la ciudad desde el alto de La Grajera. N-232 En la carretera nacional

N-232, el radar 'cazacinturones' está en el kilómetro 360, en Calahorra, cerca del acceso principal a la ciudad.