La permanencia de la Unión Deportiva Logroñés entra en un terreno que excede lo futbolístico para abrazar las matemáticas e incluso la religión. Muchos aficionados creen que lograr la permanencia exige un acto de fe, un milagro. La estadística simplemente sanciona que es complicado pero no imposible.

El promedio de puntos conseguido en lo que llevamos de temporada no es el adecuado, eso es cierto. Albert Aguilà, Natxo González y Sergio Rodríguez elevan la cuenta de resultados a 27 puntos en 29 jornadas. Pocos, muy pocos, esa es la verda. Por jornada, los blanquirrojos han sumado 0,93 unidades, cifra que proyectada a una temporada completa condena a cualquier equipo al desahucio (de seguir así, laUDL acabaría mayo con solo 36 puntos).

Por abajo, el Bilbao Athletic, colista prácticamente irreversible, ha conseguido 0,75 (29 puntos sería su balance a 38 jornadas) mientras que el Calahorra tampoco puede presumir pues ha logrado 0,79 por fecha liguera (acabaría el curso con poco más de 30 unidades).

Por delante de los logroñeses, el Real Unión también ocupa puestos de descenso con 31 unidades o, lo que es lo mismo, 1,06 puntos cada 90 minutos. En su caso, la proyección de los iruneses se dispara hasta casi los 41 puntos a curso completo.

Preceden a los guipuzcoanos dos equipos que comparten méritos (33 puntos)como es el caso del Atlético Baleares y La Nucía. El goalaverage general salva, por ahora, a los palmesanos en detrimento de los alicantinos cuya clasificación no es definitiva toda vez que tienen que recuperar un encuentro. Lo harán el 12 de abril en el Camilo Cano con el Amorebieta rival. Ese resultado puede cambiar las cuentas por la permanencia de más de un club.

Hasta la fecha, el cuadro de Palma de Mallorca ha conseguido 1,13 puntos por encuentro. Su proyección elevaría su balance el próximo 28 de mayo a 43 unidades, cifra que tendría que alcanzar cualquier equipo para soñar con la permanencia.

La Nucía en la actualidad ocupa puestos de descenso aunque su porcentaje de puntos es mayor que el del resto de competidores directos. Por jornada, los alicantinos han logrado 1,18 puntos (de continuar con este ritmo acabaría la temporada regular con cuarenta y cinco). 

A la espera de lo que suceda con su duelo aplazado, tomando como referencia el Atlético Baleares, la UDL tiene 810 minutos reglamentarios para alcanzar las 43 unidades, cifra conjugada con los averages que puede valer seguir un año más en Primera RFEF.  Para llegar a esta cifra los blanquirrojos necesitan ganar cinco encuentros de los nueve que les restan y arañar un empate. 

Si La Nucía también holla esta barrera habrá que estar atentos a la diferencia de goles general toda vez que la particular está empatada. Por ahora, los alicantinos tienen un gol en contra menos que los riojanos, circunstancia que puede ser remediada en los dos próximos meses ligueros.

El Real Unión, que tiene que pasar por Las Gaunas, alcanzaría esta cifra si suma cuatro triunfos más. En cuanto supere estos registros, los blanquirrojos estarán obligados a reformular sus cuentas.

Sumar 16 de los próximos 27 en juego no será fácil. Desde la mera perspectiva estadística, implica sumar 1,77 puntos por compromiso liguero. En la actualidad, solo el Eldense con 53 en 29 jornadas ha conseguido superar esta cifra (1,82). Los riojanos tendrían que 'calcar' los guarismos actuales del Castellón (1,69 por duelo), próximo rival en Las Gaunas (domingo, 18 horas), para conseguirlo. Por fortuna, cinco de sus últimos nueve encuentros llegarán en Las Gaunas, feudo en el que ha de hacerse fuerte para soñar con la permanencia.

Muy cerca. La permanencia, por ahora, parece una lucha que compete a los seis últimos clasificados aunque otros dos equipos, Alcoyano y Sabadell, tampoco pueden descuidarse pues suman 35 unidades. El Intercity, con 37, mientras que Cornellà y Nàstic con 38 parecen respirar tranquilos. Desde la perspectiva blanquirroja, hay que recuperar  8 puntos al Sabadell (a igualdad a méritos, los riojanos acabarían por delante) y al Alcoyano (mejor diferencia de goles general para los alicantinos). Ambos tienen la permanencia virtual a solo ocho unidades.