El Clavijo y el deporte riojano están de luto. La entidad logroñesa ha comunica el fallecimiento, a los 40 años, del pívot brasileño Sidao Santana, un símbolo de la entidad. El deportista residía en la capital riojana desde su retirada.
Sidao Santana, como indica el club, es uno de los nombres con mayúsculas de la historia del Clavijo y del baloncesto riojano. Uno de los grandes dominadores de la pintura riojana, y un jugador diferente, con sus 2,15 metros de altura, su envergadura y su carácter. A la vez, una persona especial, carismática, que conectó de una forma única con el club y con la afición durante sus años en Logroño.
Habitual de las ligas FEB, en el año 2008 llegó a Logroño como la apuesta interior de aquel Caja Rioja que entrenaban Jesús Sala y Nacho Arbués, y que acabó cayendo ante Tarragona en el cruce de semifinal de la Final a 4 por el ascenso a Oro, primera vez que el club lograba acariciar de verdad con los dedos el ansiado sueño.
Con él consolidado como líder y referente de la pintura riojana, el club volvió a rozar el ascenso en la temporada 2009/2010, cayendo en las semifinales del Play Off de Ascenso ante Peñas Huesca. En el tercer intento llegó el éxito: la histórica temporada 2010/2011, la del ascenso directo a LEB Oro con un balance de victorias de récord (25-3, mejor balance histórico de la liga hasta la pasada temporada) y un equipo para el recuerdo que unió a toda la ciudad en torno al baloncesto.
Logrado el ascenso, Sidao Santana emprendió otros caminos lejos de Logroño, en países de Europa, América y África; salvo una breve etapa en 2012, en la que inició la temporada con el entonces llamado Knet Rioja, disputando siete partidos. Queda para el recuerdo también su visita a Logroño con el Óbila Basket en el año 2019, en LEB Plata, en una noche muy especial en la que recibió el cariño de la afición riojana.
Retirado de la práctica del baloncesto profesional, Sidao había seguido vinculado a Logroño y La Rioja en los últimos años. Su trágico y temprano fallecimiento deja en un estado de shock al Clavijo y al baloncesto riojano. Jesús Sala, su ex entrenador, también se reconocía abatido por su fallecimiento.