El comité español del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) ha realizado una valoración inicial negativa del proyecto en el que la empresa Bosonit pretende instalar su sede en el Casco Antiguo de Logroño en un edificio nuevo y ha pedido que antes de seguir con la iniciativa se realice una Evaluación de Impacto Patrimonial sobre el proyecto.
Este organismo, que asesora a organismos como la Unesco, en cuestiones relacionadas con el patrimonio ha emitido un informe sobre esta cuestión tras recibir "diversas alertas patrimoniales" respecto a la iniciativa de Bosonit "tanto de asociaciones locales como de otras especializadas en el ámbito regional y nacional".
ICOMOS recuerda en su informe, que ha publicado en su web, que el Ayuntamiento de Logroño ha aprobado una modificación del Plan General Municipal en un solar del Casco Antiguo con vistas a la construcción de la nueva sede de la empresa Bosonit.
"Tras el análisis de la normativa vigente y de la documentación técnica relativa al proyecto, la valoración inicial de Icomos-España sobre el proyecto es negativa", recalcan.
Además, explican, han derivado el expediente a Icomos Internacional dada la afección que el proyecto de este edificio podría tener en la entrada a Logroño del Camino de Santiago.
ICOMOS Internacional es el interlocutor directo con el Centro del Patrimonio Mundial de la Unesco de acuerdo con los procedimientos establecidos por la Convención del Patrimonio Mundial y las Directrices Prácticas para su aplicación.
"En cualquier caso, se recuerda a los organismos competentes que, con anterioridad al desarrollo del proyecto, debería llevarse a cabo una Evaluación de Impacto Patrimonial (EIP) para valorar informadamente la posible afección del proyecto al Valor Universal Excepcional del citado bien Patrimonio Mundial, así como a su entorno y al centro histórico de Logroño", subraya el informe.
Además ICOMOS España queda pendiente de las conclusiones de los citados organismos internacionales y, mientras tanto, recomienda de forma insistente "que no se lleve a cabo ninguna actuación sin haber realizado la pertinente Evaluación de Impacto Patrimonial", concluye el informe.
La empresa de consultoría Bosonit ha proyectado su nueva sede en una de las "esquinas" del Casco Antiguo, en un solar cercano a bienes patrimonales de Logroño, como la iglesia de Santa María de Palacio.
El edificio proyectado por el arquitecto japonés Kengo Kuma es una construcción moderna, que contrastaría con los volúmenes de la zona, según han asegurado diferentes colectivos que se han mostrado en contra de que esta iniciativa se lleve a cabo en esa zona.
El edificio proyectado tendría 5.500 m2 útiles construidos y más de 2.200 m2 de espacio público, incluida una terraza panorámica de libre acceso que crearía una nueva vista de Logroño; los promotores de la iniciativa defienden el "respeto" de su edificio con la zona e incluso plantearon que se alineara con el alero de Santa María de Palacio, a algo más de 13 metros de altura, aunque la edificación crecería después alrededor de 5 metros más.
BOSONIT, DISPUESTA A LOS INFORMES PRECEPTIVOS QUE SEAN NECESARIOS
Fuentes de la empresa Bosonit han explicado a EFE que respecto al proyecto de su sede en Logroño siempre han realizado los informes que se les han reclamado de forma preceptiva y así los realizarán en el futuro cuando se les soliciten.
ICOMOS España no se ha comunicado de forma directa con ellos y tampoco les ha solicitado información del proyecto, han explicado las mismas fuentes, que han incidido en que en los trámites que han seguido hasta el momento ya se han tenido en cuenta cuestiones patrimoniales.
De hecho, han aclarado, una de os aspectos en lo que trabaja Bosinit es un informe arqueológico que tenga en cuenta los vestigios que existen en la zona y aquellos que pudieran aparecer cuando comiencen los trabajos.
Además, Bosonit todavía está a la espera de la aprobación definitiva del proyecto básico por parte del Ayuntamiento de Logroño.
En cualquier caso, han concluido las fuentes de la empresa, Bosonit busca con este proyecto, no solo contar con una nueva sede en un edificio singular, sino, también ofrecer una mejora para el patrimonio de los logroñeses.