La Jefatura Superior de Policía de La Rioja ha detenido a una mujer como presunta autora de varios delitos cometidos durante el pasado viernes en Logroño, concretamente un delito de hurto, dos delitos de daños y un delito de resistencia y desobediencia grave a agente de la autoridad.

La mujer, de 39 años de edad, residente en Logroño y de nacionalidad venezolana tiene 12 antecedentes policiales previos, tres de los cuales de la misma índole que el actual, según indican fuentes policiales en un comunicado.

Los hechos comenzaron cuando una mujer intentó robar en una óptica del centro de Logroño, para después cometer otro delito de robo en un establecimiento de venta de ropa, otros dos delitos de daños y finalmente, de resistencia y desobediencia grave a los agentes de la autoridad.

En un primer momento, los agentes acudoeron a un establecimiento de la capital, donde al parecer la detenida está causando problemas. A su llegada, los agentes reciben varios insultos y faltas de respeto por la mujer.

La dueña del establecimiento había llamado a la Sala Cimacc- 091, porque esta mujer habría intentado sustraer un artículo de dicha tienda, pero la dueña lo impidió. Finalmente la mujer abandonó el lugar sin más consecuencias.

Pocas horas después, los agentes son de nuevo comisionados a un establecimiento de moda de la capital, puesto que una mujer habría intentado sustraer varias prendas del interior de la tienda. Una vez en el lugar, a los agentes se les indicó que la mujer había huido a la vez que se les señalaba la dirección de huida.

Finalmente, la mujer fue interceptada, encontrando entre sus pertenencias una de las prendas sustraídas. La mujer comenzó entonces nuevamente a faltar el respeto y a amenazar de muerte a los funcionarios, mostrándose muy agresiva y fuera de sí, sin atender las órdenes de los agentes de la autoridad y haciendo caso omiso a sus indicaciones.

Otro varón informó a los actuantes de que la mujer, mientras se daba a la fuga, habría dañado varios vehículos que estaban aparcados a su paso en una calle principal de Logroño. Así lo comprobaron los agentes policiales, señalando que se habían producido daños en una motocicleta tirada en el suelo y en un coche tipo turismo con daños en el lateral derecho.

Según manifestó la encargada del establecimiento de moda, esta mujer poseía una actitud muy rara cuando entró en la tienda y llevaba puestas varias prendas de ropa, las cuales afirmó que sí que iba a pagar pero en el momento de estar en la caja dijo que no tenía dinero y comenzó a discutir con ella.

El total de las prendas usadas por la mujer y no aptas para la venta ascendía a casi 200 euros. También amenazó de muerte en reiteradas ocasiones a la encargada del establecimiento e hizo ademán de lanzarle un bote de cristal de colonia, algo que finalmente no llegó a hacer.