La industria ratifica su liderazgo y roza el 25% del PIB

Feli Agustín
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Consolida su segundo puesto en el país, solo por detrás de Navarra, gracias a la manufacturera, y se convierte en la región con mayor aportación al empleo

Trabajador en la fábrica de MASA del polígono El Sequero. - Foto: Ingrid

A pesar de que La Rioja registró en febrero una caída interanual del 1,4% en la cifra de negocio de la industria, frente a un avance nacional del 1,7%, esta comunidad mostró mejor comportamiento el citado mes con una subida mensual del 6,8%, superior al 5,2% del conjunto del país.  Habrá que esperar a ver cómo transcurre el resto del ejercicio  y la evolución de los acontecimientos de geopolítica internacional para confirmar  el progreso de un sector que se manifiesta como crucial en el tejido económico regional. Así lo confirma  la séptima edición del Barómetro Industrial que elaboran los Ingenieros Técnicos, en colaboración con el Colegio de Economistas, que ofrece en el informe Una perspectiva económica de la situación de la industria en España las claves para su evolución a corto plazo, 

El documento confirma el liderazgo de la industria regional en el contexto nacional, que se ratifica como la segunda comunidad donde mayor peso desempeña en el conjunto del Producto de Interior Bruto (PIB), rozando el 25%, solo por detrás del 28% de Navarra y manteniéndose, como en anteriores barómetros, ligeramente por delante del País Vasco y muy por encima del 15,9% que refleja la media nacional. Este dato supone un leve incremento sobre las cifras del pasado Barómetro, que otorgaban a la industria regional el 23,5% del valor total del PIB.

El estudio argumenta que es importante tener en cuenta la diferente composición sectorial de las comunidades autónomas, con frecuencia orientada hacia servicios como el comercio y el sector turista, o hacia la agricultura, lo que explica muchas veces parte de las diferencias de nivel de productividad y cifra de negocio, lo que se refleja «una fuerte disparidad de valores». Sobre este argumento destaca el triángulo formado por  Navarra, País Vasco y La Rioja a la cabeza de un ránking que cierran los dos archipiélagos, que apenas superan un 5%, mientras Madrid y Andalucía rondan el 10%. Estas cuatro, unidas a Extremadura, son las únicas comunidades por debajo de la media nacional.  Como es tradicional, La Rioja debe agradecer esta posición privilegiada a la industria manufacturera, donde los resultados arrojan conclusiones casi idénticas. Aunque se repiten las posiciones en el ámbito del país, esta región se sitúa más lejos de la comunidad foral, donde supone alrededor del 24% sobre el PIBindustrial, y la acerca a Euskadi, rozando, en ambos casos, el 20%, ratificando una notable distancia sobre el 11,4% nacional.

Empleo. En el informe de los colegios de ingenieros técnicos y economistas se apunta también la aportación que el sector industrial realiza sobre el empleo total de cada comunidad autónoma y, por primera vez, La Rioja pasa a desempeñar la primacía, lugar que tradicionalmente se ha reservado para Navarra. 

Así, en esta comunidad supone alrededor del 27% de los activos, frente al 25% de la comunidad vecina, a largo recorrido del 13,3% del conjunto del país.

¿Y quién contribuye más a la producción del total del sector industrial? Pues en este capítulo, La Rioja cierra, parejo con el tamaño de la comunidad, el listado. Es Cataluña la comunidad autónoma que más aporta al total del país, con un 21,68% y,  posteriormente, aparece un grupo de comunidades autónomas formadas por Madrid, Andalucía y Valencia con una contribución de alrededor del 11-12%. En el extremo inferior aparece un conjunto formado por seis territorios, donde, junto a esta comunidad, figuran Baleares, Canarias, Cantabria, Asturias, Extremadura, cuya contribución es inferior al 2,5%.

Según las conclusiones del Barómetro, la demanda en la industria española se debilita y los expertos advierten de una amenaza de «desaceleración intensa» en la eurozona, ya que la industria ha sufrido la mayor contracción en los 3 últimos años. A este respecto, el 74% de los profesionales del sector considera que se debe a una situación estructural (España es, cada vez más, una economía de servicios, con baja productividad, con la competencia de países extracomunitarios, el elevado endeudamiento público, desempleo, o inflación), frente al 26% que opina que es coyuntural, es decir, aquella que se refiere a la incertidumbre provocada por la formación de Gobierno, la desaceleración de la demanda externa u otros factores externos que generan inestabilidad.