Piden poner en libertad a 4 acusados de la violación grupal

R. Muro
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La transcripción de unos audios lleva a las defensas a recurrir el internamiento. Las niñas llamaron a Comisaría para denunciar el robo de 42,3 euros y de una sudadera

Un hombre pasea junto al edificio donde supuestamente ocurrió la violación - Foto: O. S.

Novedades alrededor de la supuesta violación grupal denunciada el pasado 9 de abril por dos niñas menores de edad de 12 y 13 años en el número 16 de la avenida de Navarra de la capital riojana. Las defensas de los cuatro acusados internados en el Centro de Menores de Valvanera han solicitado al Juez de Menores la puesta en libertad de todos ellos ante «la aparición de nuevas pruebas», tal y como confirma la letrada de uno de ellos. Entre otras, se ha trasladado al juez la transcripción de unos audios entre los que figura la llamada telefónica de las víctimas a la Jefatura Superior de Policía de Logroño. 

La sucesión de los hechos en la tarde del 9 de abril, relata, según ha podido conocer El Día de La Rioja, que la supuesta violación grupal ocurrió a las 18.30 horas. Las dos menores llaman a la Policía Nacional a las 19.59, una hora y media después, denunciando que «unos amigos nos han robado 42,3 euros y una sudadera valorada en 200 euros en una casa en ruinas» situada en la calle Cardenal Agtuirre de la capital riojana, en las proximidades de avenida de Navarra, donde supuestamente ocurrió la violación grupal. Desde la Jefatura Superior de Policía, el agente que atiende la interlocución indica a las dos menores que tienen que acudir a la Comisaría situada en La Cava a poner la denuncia. Mientras una de ellas conversa con el agente de Policía, se escuchan risas por detrás, supuestamente procedentes de la otra menor. 

En cualquier caso, en la citada conversación telefónica con la Jefatura Superior de Policía, siempre en base a las fuentes próximas a la investigación consultadas por este periódico, las supuestas víctimas no informan ni denuncian la presunta violación grupal.

Concluida la llamada, las dos menores se dirigen hasta el número 51 de la calle Duquesa de la Victoria de Logroño. A las 20.20 horas observan la presencia de la Policía Local a la que comunican que habían sido violadas por un grupo de menores en el número 16 de avenida de Navarra, supuestamente, por los mismos que les habían robado los 42,3 euros además de la sudadera.

20.20 horas. En ese momento, se encienden todas las alarmas y varias patrullas de Policía Local se desplazan, en un primer instante, hasta el edificio de avenida de Navarra, 16. Posteriormente llegan los agentes de la Policía Nacional que se hacen cargo de la investigación. 

Tanto los audios como el relato de los hechos han sido puestos en conocimiento de las partes en el Juzgado de Menores esta misma semana. Pruebas que han motivado que las defensas hayan solicitado la puesta en libertad de los cuatro acusados. Ninguno de los abogados de las defensas quiso ayer aportar datos sobre la investigación ni realizar declaraciones al respecto al tratarse de un caso de especial sensibilidad y que afecta a menores de edad, tanto por parte de las víctimas, como por parte de los acusados.

Con todas estas pruebas sobre la mesa, será el juez quien resolverá la solicitud cursada por los letrados sobre si los cuatro acusados deben continuar en régimen de internamiento cerrado o si por el contrario, los audios adquieren el peso suficiente como para decretar su puesta en libertad. Las previsiones apuntan a que la decisión no se demorará demasiado.

Tras personarse, pasadas ya las 20.30 horas del 9 de abril, el domingo de Semana Santa, agentes de Policía Local y Nacional en el lugar de los hechos, se inició la investigación que derivó, ya el día 12, con el internamiento en régimen cerrado de dos de los menores acusados como autores de la violación grupal. Un día después, el juez adoptada la misma medida para otros dos jóvenes tras ser reconocidos por las propias víctimas. Todos ellos tienen entre 14 y 17 años de edad. 

Un quinto menor, pero mayor de 14 años quedó con la prohibición de acercarse a las víctimas y otros dos menores de catorce años, quedaron bajo custodia de sus padres al ser ininputables.