La rueda de prensa de Carlos Pouso postpartido en Las Gaunas no dejó a nadie indiferente. El técnico, sin paños calientes, fue sincero en todas sus intervenciones pero todas se regían bajo la misma máxima: «De este partido me puedo quedar con cosas, pero todas negativas».
Pouso arrancó con la explicación de que había sido una derrota contundente. «Hemos estado bastante blandos en la primera parte en defensa, erráticos y con balón hemos sido parsimoniosos y excesivamente premiosos». Además, achacaba a los suyos que habían sido imprecisos en la circulación del esférico. «Cuando juegas lento y al pie, es más fácil ser preciso, bueno pues hoy también hemos sido imprecisos. Ellos han aprovechado las suyas, favorecidas por nuestros errores, sin buscarlo ellos y en la segunda parte han llevado el partido a su terreno. El nuestro es un equipo súper joven en construcción y ellos tienen muchas guerras. Si se va Kike Royo a la ducha hubiésemos acabado igual, la realidad es así», aseguró con ironía.
Se podría haber puesto por delante el Calahorra si su delantero hubiera aprovechado un 'error' de Andoni Ugarte, pero el técnico de Lejona ha aprovechado para alabar el partido del central de la UDL. «Nuestra jugada no ha sido tanto por un acierto sino por una especie de error suyo. No ha sido un error del todo, ha dejado botar Andoni un balón y luego ya no ha dejado botar ni uno. Les ha pegado unas ostias que las sacaba del estadio, es lo que tiene que hacer un central cuando es el último. El fútbol es ensayo-error y lo de Andoni es una lección para que aprendan los míos», justificó Pouso.
Sobre el segundo gol que encajaron, indicó que se trataba de un balón franco que Gonzi debía haber «atacado un poquitín antes». «Somos humanos y todos cometemos errores, el primero yo. Mientras se intente hacer lo que se trabaja, siempre voy a perdonar el fallo», exculpaba al guardameta. Así, añadió que donde más exigía él a los suyos es cuando se saltan el guion «y en defensa, en varias acciones, nos hemos saltado el guion y en ataque les hemos hecho el caldo gordo». El míster del Calahorra incidió en que la UDL sufre contra otro tipo de fútbol y que el que ellos plantearon ayer fue como el del equipo promedio que visita Las Gaunas: «cagaos de miedo con un dodotis y así es imposible ganar a la UDL».
Terminó su comparecencia con la sinceridad de que él no iba a buscar «excusas ni disculpas», sino que desde hoy se iban a poner a trabajar para el próximo domingo. «Estamos siendo deficitarios en temas puntuales y claves», culminó.
Por su parte, Diego Martínez, mucho más comedido en sus palabras, se mostró satisfecho por el resultado del partido y por una vcitoria en la que aseguró tener «bastante efectividad. Hemos salido al partido bastante conscientes de que si robabamos y salíamos rápido podíamos hacer mucho daño y así han venido situaciones que tenáimos previstas. Nos hemos conseguido poner pronto por delante y nos ha dado tranquilidad», aseveró. También afirmó que personalmente, a él le había gustado más la segunda parte de su equipo «porque hemos tenido más control del juego, no hemos permitido centros laterales ni llegaban tan profundos».
Preparan ya los partidos de la siguiente jornada ambos equipos. El Calahorra recibirá al líder, el Bilbao Athletic, el domingo a las 17h, si bien la UDLvisitará el Ciudad de Tudela, el mismo día y a la misa hora, para enfrentarse al Tudelano.