El presidente de la Federación de Empresas (FER), Jaime García Calzada, destaca el papel fundamental que juegan en la economía riojana las microempresas y pymes que desempeñan un papel clave,  tanto en el entorno urbano como en el medio rural. 

«Contribuyen a reducir el desempleo, estimulan el crecimiento y la innovación y fomentan la aparición de otras actividades en torno a ellas», destaca el presidente de la patronal que, no obstante, constata que son las micropymes, los pequeños negocios familiares los negocios que resultan, precisamente por su estructura más reducida, más afectadas por causas ajenas a su propio desempeño. Así, menciona aspectos como el aumento de la inflación, los costes de la energía y de los carburantes, con la «lacra de la competencia desleal y la burocracia o, por ejemplo cuando se producen los problemas de la escasez de materias primas» que han asolado la economía mundial. 

Al respecto, destaca que es necesario crear entornos favorables, que apoyen a las microempresas y a las pequeñas y medianas empresas y promuevan su acceso a los mercados y a la financiación en igualdad de condiciones, favorecer su actividad, su desarrollo y su crecimiento.

«Debemos contribuir a impulsar y consolidar su capacidad para resistir y mantenerse en tiempos difíciles, como los que estamos viviendo en estos últimos años», destaca García Calzada, que añade que con esta protección «estaremos consolidando y reforzando en España y en La Rioja todo lo que las microempresas pueden ofrecer y realizar en un territorio, principalmente contribuyendo a la economía de las familias y al empleo».

Desarrollo sostenible. El presidente de la FERquiere dirigir el foco a que el Día de las microempresas y las pequeñas y medianas empresas, que hoy se conmemora, significa igualmente un compromiso de apoyo a este tipo de sociedades  también en su contribución a hacer realidad los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.

Precisamente, el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, recuerda que, a partir del 1 de julio, cuando se abre el plazo para el impuesto de Sociedades, las empresas pueden marcar la Casilla Empresa Solidaria y destinar el 0,7 % de su tributo a proyectos sociales?dirigidos a luchar contra la pobreza, la exclusión social y la desigualdad.