El Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR) cuenta con unos nuevos acelerador lineal y gammacámara que, tras una inversión cercana a los 2,8 millones de euros financiada con fondos europeos, permitirán "la mejora de la eficacia diagnóstica, la eficiencia energética y la productividad del personal asistencial", informa Efe.
Así lo ha afirmado este miércoles la presidenta del Gobierno riojano, Concha Andreu, en un encuentro informativo durante su visita a estos nuevos equipamientos, en la que también ha participado la consejera de Salud, María Somalo; y el jefe del servicio de Oncología Radioterapica del Servicio Riojano de Salud (SERIS), Gustavo Ossola.
Andreu ha explicado que, con un coste de 2,25 millones de euros, "este nuevo acelerador lineal permite tratar tumores malignos y benignos eliminando las células enfermas sin dañar los tejidos sanos circundantes".
Esta máquina, ha proseguido, "está configurada para tratamientos de radiocirugía en cualquier localización, dispone de gran capacidad de adaptación en tiempo real a los movimientos del paciente, como los respiratorios, lo que aumenta la precisión del tratamiento".
Ha destacado como "importantes beneficios respecto a los tratamientos de radiocirugía que se prestaban desde 2021 la menor toxicidad asociada, mayor probabilidad de control de la enfermedad y menor número de sesiones del tratamiento, con el consiguiente beneficio para la calidad de vida del paciente".
Además, ha continuado, "los tratamientos son intercambiables entre los tres aceleradores lineales existentes en el CIBIR, por lo que no se interrumpe el servicio en caso de avería o paradas imprevistas, e incluye sistemas de inmovilización abiertos para mayor comodidad del paciente".
Por su parte, Somalo ha especificado que "este nuevo aparato, ya instalado, está en fase de pruebas de calibración, tras lo que se solicitará autorización al Consejo de Seguridad Nuclear, y la previsión es que los tratamientos a pacientes puedan comenzar a finales de marzo, con capacidad para atender a 5 pacientes por turno", ha resaltado.
Ha precisado que la nueva gammacámara ha supuesto una inversión de 534.576 euros y lleva en funcionamiento desde el pasado 10 de enero en sustitución de a la antigua gammacámara, implantada desde 2004.
También ha resaltado que este es "un equipo vanguardista de alta calidad y tecnología digital que proporciona una funcionalidad completa en Cardiología, Oncología, Neurología y Medicina Nuclear general".
Esta máquina, ha proseguido, "permite localizar, de forma precoz, diferentes tumores, lesiones e infecciones, lo que posibilita el tratamiento de patologías en sus estadios más iniciales, incrementando las posibilidades de éxito de los tratamientos y, por tanto, la calidad de vida de los pacientes".
Además, "aporta más sensibilidad y resolución espacial, lo que permite ver lesiones cada vez más pequeñas; así como mayor calidad de imagen; más precisión diagnóstica; menor número de pruebas adicionales; y menor tiempo invertido en las exploraciones y dosis inferiores al paciente", ha explicado.
Ha detallado que, "hasta el pasado día 20, se han realizado aproximadamente 200 exploraciones en 160 pacientes, y la previsión es llegar a atender a 1.250 pacientes durante 2023".
En su intervención, Ossola ha especificado que el acelerador lineal permite que "no haya que hacer una herida para acceder al paciente, sino que se llega a la lesión y, con una alta dosis de radiación, se destruye únicamente esa lesión".
"Por ejemplo, hay lesiones del cerebro en las que, abrir la cavidad craneana para acceder a ellas, trae una serie de complicaciones y puede tener secuelas, y eso se trata con radiocirugía, o sea que, si hay necesidad de abordar quirúrgicamente sin necesidad de abrir el cráneo, se pueden tratar esas lesiones", ha recalcado.