Parecía que sí, pero al final no. Sanidad tomó ayer la decisión de aplazar para más adelante la eliminación de las mascarillas en hospitales, farmacias, centros de salud, fisioterapeutas, residencias de mayores y dentistas.

El Consejo Interterritorial de Salud respaldó, el pasado viernes, la idea de que las mascarillas dejaran de ser obligatorias en los espacios anteriormente mencionados, en

una reunión en la que participaron el ministro de Sanidad, José Miñones, y los diferentes consejeros del ámbito sanitario de todas las comunidades autónomas.

A pesar de esto, las mascarillas no se iban a erradicar al 100%, sinoque iban a seguir siendo necesarias e imprescindibles en determinados lugares, como las UCIs, zonas

de pacientes inmunodeprimidos, quirófanos, urgencias y zonas oncológicas.

Esta decisión cerraba un ciclo que se inició en 2020 cuando el uso de la mascarilla era generalizado para todo el mundo, y que se suponía que iba a terminar esta misma semana, pero parece que no va a ser así, aunque Miñones aseguró que se va a producir «tan pronto como sea posible».

Miñones explicó que el motivo de este aplazamiento de la decisión es que el Consejo de Ministros no iba a aprobar solo la norma de las mascarillas, sino que «es todo un decreto de crisis sanitaria, que tiene que ser informada y tiene que pasar los trámites administrativos correspondientes».

Por su parte, el Director General de Salud Publica, Consumo y Cuidados de La Rioja, José Ignacio Aguado, indicó que este aplazamiento se puede deber a un problema jurídico-técnico.

El Gobierno de La Rioja, señaló, que oficialmente no ha recibido «ninguna comunicación al respecto ni ningún hecho que haya llamado la atención».

«La obligatoriedad de la mascarilla era con respecto a un Real Decreto, por lo que será un problema relacionado con su derogación, su limitación o algo jurídico, porque

desde el punto de vista epidemiológico no hay ningún cambio», afirmó.

Asimismo, Aguado apuntó que le confirmaron que todos los Consejeros de Salud estaban de acuerdo con esta medida en la reunión que se celebró el pasado viernes,

además de que «nadie dijo nada en contra de esta medida en la Comisión de Salud Pública que tuvo lugar un día antes».

Además, añadió que ahora hace buen tiempo y hay temperaturas más altas, «lo que es peor para el virus a la hora de transmitirse».

Aguado también dijo que este virus es estival, por lo que «habrá picos de contagios desde octubre hasta febrero y marzo, una época en la que habrá que estar más atentos en esas fechas y adaptar las vacunas a los nuevos tipos de linajes del virus.

Por otra parte, Aguado avisó de que la Covid-19 no ha desparecido, así que «desde el Gobierno de La Rioja siempre se ha transmitido la importancia de que la ciudadanía se proteja a sí misma y a las personas de su alrededor cuando tenga síntomas».

USO RESPONSABLE. En este sentido, el presidente de la Comisión COVID del Colegio de Médicos de La Rioja, Fernando Martínez Soba resaltó que el uso responsable de la mascarilla supone «utilizarla cuando es necesario y en base a los consejos sanitarios».

Señaló que las recomendaciones sanitarias son «consejos» que deben ser asumidos con responsabilidad por parte de todos, y la confianza en el sistema sanitario «debe servir para que la ciudadanía siga las recomendaciones».

Por eso, remarcó que el uso de la mascarilla en los entornos sociosanitarios en relación a la Covid-19 debe adaptarse a la situación actual, así que, «esta decisión, con la necesaria prudencia, debe orientarse al retorno a la normalidad».

A su vez, fuentes del Colegio de Farmacéuticos de La Rioja recordaron a los ciudadanos la necesidad de «tomar medidas de prevención, en especial para la protección de los grupos de población más vulnerables»

También aseguraron que los profesionales farmacéuticos de la región cumplirán lo que los expertos acuerden una vez se haga efectiva la aprobación de esta medida por el Consejo de Ministros y su posterior publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE).