La Rioja alberga cerca de setecientos vestigios franquistas, entre inscripciones, placas y monumentos, que la ley de Memoria Democrática obliga a retirar. Entre todos ellos,   el monasterio de Yuso muestra aún una placa con la inscripción de José Antonio Primo de Rivera en las dos primera líneas, seguida de otros nombres a primera vista ilegibles. Sobre la placa, una cruz que los responsables de la elaboración del catálogo de vestigios franquistas creen que «no tiene simbología pero si afinidad» ya que «también aparece en otros templos» ligada a inscripciones. 

La placa se sitúa en una de las fachadas exteriores del monasterio de San Millán, en concreto en el ala  ubicada junto a los jardines de Yuso. Desde la asociación La Barranca piden que se actúe en este caso siguiendo las directrices de la Ley de Memoria Democrática como en cualquier otro templo. 

Yuso fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en diciembre de 1997, si bien, el máximo responsable de La Barranca, Jesús Cámara, entiende que la actuación debe ser similar y que la declaración no tiene por qué influir. Es más, al tratarse de una placa y no de una inscripción, su retirada se presenta más accesible.

En cualquier caso, tanto el profesor de la Universidad de La Rioja, Vicente Lázaro, junto a una de las redactoras del catálogo de vestigios franquistas, Sandra del Pozo, que hoy cuelga en la página web del Gobierno de La Rioja, consideran que «habría que retirar tanto la placa como la cruz, por cuestiones de afinidad». Un catálogo en el que además, se cita otra placa en la iglesia también en  San Millán de la Cogolla en la que se lee 'Caídos por Dios y por España' y que de igual forma estaría sujeta a la normativa de la memoria democrática.

Técnicas a usar. Todo ello a la espera de que el Consejo de Patrimonio defina este mismo jueves la técnica menos agresiva para eliminar las inscripciones de La Redonda, Santiago El Real y Palacio, que también muestra el nombre de José Antonio Primo de Rivera en la fachada principal del templo, a la derecha de la portada.

Según Vicente Lázaro y Sandra del Pozo, «no hay muchas inscripciones en La Rioja realizadas en su día en la fachada de los templos». Aún así, son las que generan un mayor problema al Consejo de Patrimonio con el objetivo de utilizar la técnica menos lesiva. 

Existe ya algún caso en la Comunidad autónoma en el que ya se han eliminado alguna inscripción de estas características «mediante el pulido y limado de la piedra». En el caso de Fuenmayor, l masilla no arrojó los resultados esperados al ennegrecerse.