Dos clubes votaron a favor del Modelo A, partidario de la gestión autónoma, 22 se decantaron por el B, bajo el paraguas de la Federación,y dieciséis de los 18 clubes que solicitaron más aclaraciones por parte de la RFEF se abstuvieron de votar el pasado 27 de enero.Para explicar el resultado de esta deliberación y volver a llamar a consultas, la FederaciónEspañola remitió una carta de siete folios a los cuarenta clubes de Primera RFEF. 

Lejos de obtener la unanimidad demandada, la división es patente. La mitad de las entidades sí que apuestan por mantener el statu quo (laEspañola se responsabiliza de los derechos televisivos y de los activos publicitarios de los clubes, continúa su línea de ayudas pero, a cambio, se erige en árbitro de una futura negociación colectiva entre patronal y sindicatos) pero un tercio de los protagonistas de la categoría, entre ellos la SDL, Unionistas, Eldense o Numancia (cada uno con sus propios intereses no necesariamente convergentes) exige claridad en la propuesta y, sobre todo, desligar los modelos de gestión de cuestiones vitales como el control de gasto y la negociación colectiva que, en su opinión, nada tienen que ver con la gestión de los derechos derivados de la competición.

Anoche, los dieciocho clubes mantuvieron una nueva reunión telemática para expresar su postura común. Rubiales dio ayer 48 horas para re-votar.

El Calahorra, en principio, es de los que siempre se alinea del lado de la Federación. La UDL, como confesó Juanjo Guerreros en La 7 de La Rioja, votó por el Modelo B y está por ver qué decisión adoptan ahora los dieciocho clubes, entre ellos la SDL, de los no alineados.