Hace no muchos años, La Rioja contaba con dos representantes en la elite del fútbol sala femenina, una buena participación en el segundo escalón y una liga sénior propia. Ahora la situación es bien distinta.El Promesas EDFes el referente del fútbol sala riojano, pero también es el único representante sénior, circunstancia que le ha obligado a buscar acomodo en la Liga Navarra.

Con el objetivo de regresar lo más rápido posible a la Segunda división del fútbol sala femenina, las logroñesas iniciaron ayer la pretemporada. Lo hicieron con muchas novedades aunque, en las próximas jornadas, el equipo que dirigen la dupla conformada por NachoOstiategui y Carlos Ferreiro, nombres propios del sala riojano, irá sumando efectivos.

La primera piedra de toque llegará a finales del mes de septiembre, cuando las logroñesas disputen su torneo de presentación.

La competición, con equipos navarros como rivales, comenzará en la primera quincena de octubre. Hasta ese momento, Nacho Ostiategui y Carlos Ferreiro tratarán de conformar un bloque sólido.

Antes del triangular de presentación del próximo 30 de septiembre, las logroñesas se medirán este sábado (Polideportivo Maristas, 12.30) a la Txantrea, un clásico del fútbol sala navarro.

Paco Rivillas, director deportivo del Promesas EDF, se mostró satisfecho «por haber mantenido el bloque» que el pasado año peleó hasta la última jornada por la permanencia. A esta base se suma el regreso de Verónica Morales y SoniaArmas, ex que estuvieron en el ascenso, mientras que también regresa Carmen Abad.

La Liga Navarra está compuesta por diez equipos. El mejor de la competición regresará en la 24-25 al segundo escalón del fútbol sala femenina.

Entre los nuevos rivales del equipo de Nacho Ostiategui y CarlosFerreiro destaca la presencia del Txantrea, del Olite y de los filiales de Xota y Ribera Navarra. Igualmente, el Orvina, un clásico de la Primera división femenina, será uno de los rivales de las logroñesas por reverdecer viejos laureles.