Salud usará el Da Vinci para otorrinolaringología en enero

David Hernando Rioja
-

El hospital San Pedro ha realizado 94 intervenciones con este robot desde el mes de abril entre las especialidades de cirugía general, urología y ginecología

Un grupo de cirujanos y enfermeras utilizan el robot Da Vinci durante una operación - Foto: Rioja Salud

El hospital San Pedro tiene previsto ampliar los servicios del robot Da Vinci para que pueda ser utilizado en el servicio de otorrinolaringología el próximo mes de enero.

La coordinadora quirúrgica, Silvia Álvarez, explica que este robot se podrá usar para combatir diferentes patologías, como tumores orofaringeos o en la base de lengua. «Otros hospitales españoles ya lo están haciendo con resultados prometedores, como en Valdecilla (Santander), donde se hace una mezcla entre otorrinolaringología y cirugía torácica», indica.

Previamente, apunta, los hospitales que quieran usar este robot en las operaciones deben conseguir una acreditación. «Los médicos que se van a encargar de realizarla en otorrinolaringología han hecho una formación en sala y con un simulador después de los meses de verano», detalla.

Recuerda que el robot Da Vinci empezó a usarse el 12 de abril en cuatro especialidades, urología, ginecología y cirugía general con dos secciones. Hasta el momento se han hecho un total de 94 intervenciones aunque «está previsto llegar a las 100 en noviembre y a las 150 cuando acabe el año».

La especialidad de cirugía general es la que más procedimientos con este robot ha realizado hasta ahora con un total de 42, de los que 29 son cirugías de esofagástricas y 13 en la sección de colorrectal. En urología se han hecho unas 35 prostatectomías radicales aunque está previsto ampliar a cirugías de riñón y de tumores  de vejiga, y en ginecología se han realizado 17 procedimientos, desde histerectomías por cáncer de endometrio hasta actuaciones sobre patologías benignas como miomas. «En esta última especialidad está programada próximamente  una cirugía de linfadenectomías pélvica y para aórtica», añade.

Este robot también puede realizar otro tipo de intervenciones quirúrgicas. En cirugía general se pueden hacer colectomías, resección del recto, sigmoidectomía, cirugía bariátrica, cirugía gastroesofágica, cirugía hepatobiliar y cirugía pancreática; en ginecología hay posibilidad de realizar sacrocolpopexia, miomectomía o endometriosis profunda; y en urología se pueden hacer  cirugías de próstata, riñón, vejiga y de trasplante vivo.

Destaca que el hospital lleva un tiempo en el que todos los días se practica una cirugía robótica. «La verdad es que en los últimos meses se está notando que se están superando las famosas curvas de aprendizaje, consiguiendo hacer cada vez más intervenciones y que los servicios vayan asumiendo bastantes más  pacientes», señala. Por eso, la coordinadora estima que, cuando se supere totalmente esta curva de aprendizaje, se podrán realizar unas 250 operaciones al año, cien más que las previstas en este 2023.

Curva de aprendizaje. Respecto a esta curva de aprendizaje, la coordinadora quirúrgica, Silvia Álvarez, puntualiza que el robot no opera solo sino que «mejora la calidad del trabajo del cirujano». Estas cirugías, apunta, las desarrollan médicos experimentados pero «estos deben aprender a hacerlas con el robot Da Vinci, así que se necesita un tiempo de aprendizaje y mucho compromiso por parte del personal sanitario».

Asegura que la llegada de este robot al hospital se cogió «con muchas ganas y con mucha ilusión» porque el robot lleva años de experiencia en el mundo de la medicina. «La respuesta ha sido muy buena, tanto por profesionales como pacientes», afirma.

La doctora califica como «éxito» el trabajo que se ha realizado hasta el momento en el hospital con este robot. «Podemos estar muy orgullosos de todo lo que se hecho porque esto es un reto. Estamos hablando de una máquina de última tecnología, a la que ha habido que adaptarse, no solo el personal médico que hace la formación, sino también el resto de profesionales implicados en el proceso», indica. De hecho, detalla que en la unidad de enfermería se ha creado un grupo especifico compuesto por enfermeras robóticas.

«Los médicos que trabajan con este robot han superado con muy buena nota a nivel organizativo, de personal y de números», subraya.

Las personas encargadas de manejar este robot han aumentado con el paso de los meses. En este momento hay un grupo de enfermería pediátrica compuesto por cinco o seis enfermeras, seis cirujanos acreditados de consola que se encargan de manejar el robot y siete cirujanos asistentes. Con motivo del uso de esta máquina robótica en la especialidad de otorrinolaringología, se añadirán dos cirujanos a este personal acreditado, un de consola y otro asistente.