India es un "gran desconocido" para las empresas españolas pero tiene muchos alicientes para ser un objetivo no solo para exportar sus productos sino también para trasladar allí algunos de sus procesos de producción.
Así se lo ha transmitido a las empresas riojanas la consultora Indversis, en una jornada organizada por la Cámara de Comercio, dentro de su objetivo de diversificar la economía de la comunidad.
Iñaki Soto, de esta consultora, ha subrayado a EFE que La Rioja, como la mayor parte de las regiones españolas tiene un gran campo de crecimiento en su comercio con India, como revela el dato de que en 2023 se importaron de ese país productos por valor de 5.847 millones de euros pero solo se exportaron por 1.779.
Para La Rioja el dato es peor, dado que sus ventas apenas se registraron por valor de 3,5 millones de euros, frente a los 30 en importaciones.
"Es cierto que el producto estrella de La Rioja, el vino, es visto en India como algo muy elitista y por eso va a costar entrar, pero ya es algo que ha sucedido en otros mercados y se ha logrado", detalla Soto.
En cualquier caso, tiene claros los alicientes pata trabajar el mercado indio, dado que ya es el país más poblado de la tierra, con 1.400 millones de habitantes, su economía crece de forma sostenida en los últimos años a un 7 % anual "y se prevé que siga así una década" con lo que "ya no es que sea ahora la quinta potencia económica, sino que está a un paso de superar a otras".
El crecimiento se traduce en que "el poder adquisitivo de las clases altas es potente y hablamos de un volumen de personas como el de toda la población de Francia".
Unido a eso está el que "la clase media ya supone el 30 por ciento de la población, en muchos casos es gente joven que vive sin apreturas y buscan productos de consumo que se han considerado antes solo para las élites" principalmente los que proceden de Europa.
La nueva fábrica del mundo
"Es cierto que el gobierno indio le puso un arancel altísimo al vino para desincentivar su consumo", reconoce, pero cree que "La Rioja tiene otras oportunidades" con productos que "allí se aprecian, como el vinagre o el aceite de oliva".
Pero en su mensaje a las empresas riojanas, Soto ha incidido en que más allá de vender productos desde aquí, también pueden explorar la idea de invertir en un país que "quiere ser la nueva fábrica del mundo, sustituir a China".
"Ahora todavía es relativamente asequible invertir en India, porque buscan atraer empresas industriales y hay bastantes incentivos, tanto del Gobierno estatal como de algunas regiones", detalla Soto.
Subraya que "no se trata de deslocalizar las empresas españolas o riojanas, en este caso, sino el fabricar allí cosas que puedes vender allí en un mercado tan grande" y pone como ejemplo el mercado del automóvil "con una producción cinco veces superior a la de España" lo que "demuestra el atractivo para industrias de componentes como las que hay en esta tierra", concluye.