Acusan a un exentrenador del Varea de abusar de 8 menores

El Día
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La Policía tiene indicios de que prometía a los chicos que jugarían en Primera, al ser ojeador del Osasuna, para conseguir intercambios sexuales. Tenía abundante pornografía infantil. El club navarro se personará como acusación en el juicio.

Guillermo de Soto, en una imagen de archivo cuando era entrenador del C.D. Varea. - Foto: Óscar Solorzano

«Un presunto depredador sexual», así calificó el jefe de la Brigada Provincial de la Policía Judicial, Eduardo Esteban, a Guillermo de Soto, exentrenador del Varea y detenido el verano pasado por un delito de corrupción de menores y otros tres de abusos sexuales por tocamientos a un mínimo de ocho chicos de entre 15 y 18 años, a quienes, supuestamente, prometía contratos deportivos. También se le atribuyen un delito de pornografía infantil y otros tres de acoso sexual de menores por internet o child-grooming.

Esteban compareció ayer en una rueda de prensa para informar de esta operación junto a la delegada del Gobierno en La Rioja, Beatriz Arraiz, el jefe superior de la Policía Nacional en La Rioja, Manuel Laguna; y la inspectora de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM), Zita Cascallana. 

La investigación se inició en junio de 2022, al recibir una denuncia por abusos sexuales a un menor, presuntamente cometidos por su entrenador, tras lo que se le arrestó en agosto y se le incautó un móvil y una tableta, en los que había casi 63.000 archivos multimedia de índole sexual con menores. 

Durante los diez meses que ha durado la investigación, que continúa abierta por unos hechos presuntamente cometidos entre 2019 y 2020, se identificaron a siete víctimas más, todos adolescentes riojanos. La Policía no descarta la aparición de más menores afectados, ya que el detenido trabajó muchos años como entrenador deportivo.

 

Contratos en primera. Según la versión policial, Guillermo de Soto, conocido como Willy, aprovechaba su condición de ojeador del Osasuna, club navarro de Primera División en el que trabajó hasta agosto, para ofrecer supuestos contratos profesionales a los chavales. 

Contactaba con ellos a través del club del Varea, donde entrenaba. Una vez que conseguía la confianza de los jóvenes, contactaba con ellos a través de las redes sociales o de aplicaciones de mensajería y, entonces, les pedía fotografías de sus partes íntimas o citas para verse a solas e, incluso, llegó a ofrecer dinero a alguno a cambio de mantener relaciones sexuales.

Al parecer llegó a realizar tocamientos a algunos y también convenció a otro para que fuera con él a otra ciudad bajo la falsa promesa de firmar un contrato con un equipo profesional, y allí le propuso acudir a un hostal para mantener relaciones, lo que el menor declinó. Algunos chavales accedían por el «temor» de que, si se negaban, no podrían cumplir sus expectativas profesionales futbolísticas. 

En la actualidad, del Soto permanece en libertad provisional a la espera de juicio. Al conocerse que utilizó su puesto como ojeador del Osasuna, el club navarro anunció que se personará como acusación particular en el juicio.

 

Dos denuncias previas archivadas. No era la primera vez que Willy de Soto estaba bajo sospecha. En 2015 y 2021 hubo dos denuncias previas a estos hechos por «episodios semejantes», que fueron archivadas en sede judicial, pero se desconoce si sucedieron en el mismo club de fútbol.

No fue hasta agosto del año pasado cuando se detuvo al exentrenador del Varea. Estaba en Ventas Blancas y tras su detención, pasó a disposición judicial para ser puesto en libertad con la obligación de comparecer en el juzgado periódicamente. 

Los hechos causaron una gran consternación en el mundo del fútbol. De hecho, el  presidente del Club Deportivo Varea, Diego Aguado, subrayó, en declaraciones a EFE, que «lo primero que hay que pensar es en lo lamentable que es el sufrimiento de los menores» de los que presuntamente abusó un exentrenador de la entidad, algo que «nos hace daño, como ya lo hizo hace meses».