Nuevo paso hacia el abismo

Roberto Adrián Gil
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El Tudelano tira de galones para firmar su tercera victoria consecutiva y hundir al Haro

Isaac Manjón, que tuvo una buena ocasión, no puede con su par. - Foto: Antonio Corral

Ficha técnica:

Haro: Fermín Sobrón; Peciña (Valtteri, 66), Jon Echaide (Gaizka Martínez, 46), Javi Duro, Héctor Martínez; Borja García (Jon Iru, 63), Manjón, Josua, Morgado (Adrián Butzke, 17), Valiño (Joseba, 46); Mikel Bueno.

Tudelano: Felipe; Yasin, Meseguer (La Laguna, 84), Diego Royo, Sito; Gualda, Sarriegui (Iván Martínez, 73), Samanes (Gassama, 80), Diego Suárez, Rodrigo (Delgado, 84); Ángel Sánchez.

Árbitro: Pablo Monterrubio Torres (Aragonés) amonestó a Echaide, Adrián Butzke y a Gaizka Martínez por parte del Haro.

Goles: 0-1 M.6: Ángel Sánchez marca el primero con un buen derechazo; 0-2 M.24: Sarriegui aprovecha un rechace dentro del área; 0-3 M.67: Rodrigo culmina una buena contra.

Incidencias: partido correspondiente a la jornada 13ª celebrado en el Estadio de El Mazo a puerta cerrada.

Lo que mal empieza mal acaba y, el Haro, puede dar fe de ello. El equipo blanquinegro comenzó encajando muy pronto y acabó pagando su mala puntería de cara a portería. Ángel Sánchez, Sarriegui y Rodrigo redondearon el marcador para un Tudelano que se acerca a posiciones cabeceras y que hunde, un poco más si cabe, al Haro en la clasificación.

Con muchas esperanzas arrancó el partido en El Mazo con un Haro probando, desde el principio, a un Felipe que sería uno de los mejores al término de los noventa minutos. Mikel Bueno, cerca estuvo de hacer el primero pero, como viene siendo ya un habitual en el conjunto blanquinegro, el Tudelano marcó primero.

Ángel Sánchez, sustituto hoy del goleador Álex Sánchez, se vistió de killer para resolver dentro del área, con un gran derechazo, un óptimo centro de Gualda. El balón entró por la misma escuadra pese a la estirada de unFermín Sobrón que nada pudo hacer por evitarlo.

Con este panorama y cuando parecía que nada más podía pasarle al Haro, nuevo  contratiempo. Morgado tenía que abandonar el césped por lesión. Entraba en su lugar AdriánButzke que se colocaría como referencia ofensiva.

El 0-2 llegaría tras un córner. Ya había avisado el Tudelano de su potencial a balón parado segundos antes. Sarriegui, tras varios rebotes dentro del área, recibió libre de marca y batió la meta jarrera por segunda vez. Era el minuto 24 y ya se le ponía muy negro el panorama al equipo dirigido, en el día de ayer, por Keku Urzanqui (Aitor Calle estaba en la grada tras su expulsión el pasado miércoles frente a la SDL).

A partir de este momento comenzaron las mejores ocasiones de un Haro que nunca se rindió. Primero probó fortuna Isaac Manjón desde fuera del área. Butzke la bajó y se la dejó de cara al ‘7’ jarrero que puso a prueba a un Felipe que, con una gran intervención, consiguió desviar a córner.

Minutos más tarde, Mikel Bueno volvió a tener una doble oportunidad pero, una vez más, le faltó conectar con el esférico. Eran los mejores minutos del Haro pero el gol seguía sin llegar.

Por su parte, el equipo de Nacho Martín demostraba su potencial cada vez que superaba la divisoria del terreno de juego. Samanes y Rodrigo fueron un auténtico dolor de cabeza para una defensa que, pese a los errores en los dos primeros tantos, supo contener a los atacantes navarros.

En la segunda mitad y con un carrusel de cambios por parte de los locales, el encuentro entró en una dinámica de imprecisiones hasta que, a falta de veinte minutos, llegó la sentencia final.

Samanes, muy activo durante todo el encuentro, avanzó metros por la banda derecha, se la filtró a Ángel Sánchez dentro del área que, tras un buen recorte, se la dejó a placer a Rodrigo para hacer el 0-3 y sentenciar un encuentro en donde el que falla, la acaba pagando.

Valtteri pudo marcar en una buena acción colectiva por la banda derecha pero, una vez más, volvió a aparecer el meta navarro para evitarlo el tanto local.

Al final, tres puntos para un Tudelano que sigue aspirando a posiciones de Liga Pro y que deja a un Haro hundido y muy tocado como colista, con tan sólo siete unidades en su casillero.