Los accidentes laborales crecen un 30% con 4 fallecidos más

Feli Agustín
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Diez muertos y 5.571 accidentados hasta noviembre, que contabiliza 1.253 más que en el mismo periodo de 2021

Accidente en la planta de biodiésel de Calahorra,que provocó dos muertos. - Foto: Óscar Solorzano

El doble accidente mortal sufrido en la planta de biodiésel de Calahorra, donde dos trabajadores, de 30 y 41 años, perdieron la vida en una grave explosión que se produjo en sus instalaciones fue el siniestro laboral más grave acaecido en LaRioja el año pasado, que registró diez fallecidos hasta noviembre, cuatro más que el año precedente, en el mismo periodo, aunque 2021 cerró con siete fallecidos.

A falta de conocer los datos definitivos de 2022, las cifras divulgadas hasta noviembre invitan a afirmar que no fue un buen año para la siniestralidad laboral. De hecho, hasta el penúltimo mes del año, ya se habían producido más accidentes que en el global de 2021, cuando se contabilizaron 4.720 frente a los 5.571 hasta noviembre de este año,  [4.318 en el mimo mes de 2021] lo que implica un aumento  del 28,9%, según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social. Cierto es que a pesar de este aumento, 5.139, un 99,2% fueron leves y 29 graves;de ellos, 395 son itínere, con un crecimiento del 7%, que registraron 390 heridos leves, tres graves y dos fallecidos.

Del total de siniestros, 296 los sufrieron los autónomos durante su jornada laboral, de los que 292 fueron leves; tres graves y uno fue mortal. In itínere, tuvieron 19 accidentes, que provocaron 18 heridos leves y un fallecido.

Sin perjuicio del aumento generalizado -solo agricultura redujo la cifra de siniestros-, el hecho de que La Rioja sea una de las pocas comunidades que contabilice los enfermos por covid en el ámbito sociosanitario justifica el aumento de la siniestralidad en 2022. Así, y desmenuzando los datos que por sectores que ofrece el Instituto de Estadística de La Rioja, en el primario se registraron 260 personas siniestradas frente a las 302 hasta noviembre de 2021;1.507 en la industria, con un aumento sobre los 1.431 del ejercicio precedente;mientras construcción también ha experimentado un crecimiento, al pasar  de 563 a 640.

 Pero el crecimiento más destacado de la siniestralidad laboral en La Rioja lo muestra el sector servicios, que ha experimentado un incremento superior al 50%, al sumar 3.164 el año pasado frente a los 2.022 en 2021.

Este aumento se justifica por la desbocada subida, de un 165%, en ámbitos sanitarios y de servicios sociales, que hasta noviembre de 2021 sumaron 529 afectados frente a los 1.373 del año 2022. Ello no es óbice, destaca la responsable del área de Salud y Medio Ambiente de Comisiones Obreras de La Rioja, Eva Fernández Antón, para que sean sectores «muy machacado por la pandemia», y sufren problemas «psicosociales y musculoesqueléticos», además del coronavirus.

Fernández Antón echa en falta «cultura preventiva» para reducir la siniestralidad y resalta que «cuánto más informados estemos de los riesgos de nuestros trabajos, más conscientes seremos de ello y más medidas preventivas vamos a generar», de tal manera que se reduciría la accidentabilidad.

Insiste en que una evaluación del puesto de trabajo «bien hecha  en medidas preventivas» tiene que conllevar la reducción de siniestralidad laboral, aunque, argumenta, el problema reside en la valoración de los riesgos. 

No obstante, señala que si «la gente no se conciencia de los riesgos, no adopta las medidas necesarias», lo que no es óbice para que la empresa «informe y forme» sobre las circunstancias peligrosas del empleo para que le trabajador sea consciente de las mismas.

«Un trabajador no tiene por qué conocer los riesgos a los que se enfrenta; debe contar con un servicio de prevención con personal técnico que le informe de ellos», afirma la responsable de Salud laboral de CCOO.

Tres en 2023. Según los datos que maneja Comisiones Obreras, en lo que llevamos de año, se han producido tres fallecidos en accidentes laborales. Dos de ellos lo han sido in itínere, en un accidente ocurrido el 18 de enero,  cuando un furgón y un turismo colisionaron frontalmente en la carretera N-111 en Albelda, y murieron un médico anestesista del hospital de Los Manzanos de 61 años que acudía a su centro de trabajo y un empleado de la empresa AC Reformas Decoración de 41 años, que volvía a casa de trabajar.

El tercero ha sido un trabajador que permanecía en la UCIdesde el 28 de septiembre, cuando sufrió una caída mientras trabajaba en las obras de construcción junto al parque San Miguel. Este operario,  que trabajaba para la empresa Serneo Rioja, falleció el 6 de enero y es la primera víctima mortal de 2023.