El SERIS formó a 442 estudiantes universitarios y FP en 2023

David Hernando Rioja
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La mayor parte de estos alumnos provienen del grado de enfermería, con 225, mientras que 53 vienen de 15 facultades españolas y 164 de varios centros que cuentan con ciclos de Formación Profesional

Una doctora y dos estudiantes en prácticas atienden a un paciente en una consulta - Foto: Óscar Solorzano

Las prácticas laborales es un aspecto fundamental en la formación de todos los trabajadores. El Servicio Riojano de Salud (SERIS) ofrece la posibilidad de que jóvenes estudiantes de diferentes universidades puedan aprender y formarse gracias a la experiencia y conocimiento de los médicos que trabajan en el centro.

Un total de 442 alumnos  de 54 centros educativos españoles, en donde se cursan ciclos formativos de grado medio y grado superior de FP, así como grados universitarios en Ciencias de la Salud, realizaron prácticas en los centros del Servicio Riojano de Salud en 2023.

El SERIS tiene suscrito un convenio con 45 universidades españolas para que sus alumnos puedan realizar prácticas académicas curriculares y extracurriculares y en algunos casos, estancias clínicas, programas de cooperación educativa y Practicum. Por este motivo, 53 alumnos universitarios de 15 facultades realizaron prácticas en centros sanitarios. Estos son estudiantes de los grados de Medicina, Enfermería, Biología, Química, Psicología, Farmacia, Bioquímica y Trabajo Social.

El mayor número de jóvenes en prácticas lo proporcionó la Universidad de Navarra, con 16 alumnos que cursaban grado de Medicina; seguido por la Universidad de La Rioja, con ocho alumnos de Grado de Trabajo Social; y el mismo número de la Universidad de Zaragoza, con seis estudiantes del Grado de Medicina y dos de Psicología.

Aparte, el SERIS también acogió el pasado año a 225 alumnos de la Universidad de La Rioja de segundo, tercer y cuarto curso del Grado de Enfermería.

La cartera de alumnos en prácticas se completa con los estudiantes que cursan ciclos formativos de grado medio y grado superior de Formación Profesional. Concretamente, hubo unos 164 en el 2023.

El mayor número de alumnos provenían del IES Duques de Nájera con 47, quienes cursaban los ciclos formativos de Cuidados Auxiliares en Enfermería, Anatomía Patológica y Citodiagnóstico, Dietética y Farmacia y Parafarmacia. El  CPEIPS Paula Montal envió a 43 alumnos de los ciclos formativos de Cuidados Auxiliares en Enfermería y de Farmacia y Parafarmacia; y el  Centro de FP Sanitario en Ciencias Radiológicas llevó a 38 alumnos que forman parte del ciclo Imagen para el Diagnóstico y Medicina Nuclear.

La otorrinolaringóloga del Hospital San Pedro, Marta Zabaleta, es una de las 44 tutoras que se encarga de enseñar y apoyar a estos jóvenes. Destaca que los profesionales que hacen este acompañamiento están «muy motivadas», además de que realizan este trabajo fuera de su horario habitual. «Nos creemos importantes para ellos, ya que somos un punto de conexión entre lo que estudian en el grado y el salvaje mundo hospitalario en el que se tienen que hacer hueco durante su residencia», subraya.

Asegura que esto es «mucho más fácil de hacer» en un hospital de mediano tamaño como el San Pedro donde se hace todo excepto la neurocirugía porque «no la hay». «Mientras que en un macro hospital hay el doble de residentes y de alumnos pero no el doble de médicos», apunta.

Por otra parte, Zabaleta valora la capacidad que tienen los estudiantes que provienen del Grado de Medicina. Califica a estos alumnos en prácticas como «muy capaces» porque «han sufrido una presión académica brutal. Son muy buenos estudiantes, los mejores de la clase». «Aunque echo en falta un poco más de relajación en esa competencia que tienen que vivir y por la que tiene que pasar para optar a una nota tan alta. Son gente súper preparada pero súper competitiva», destaca.

A pesar de esto avisa que en medicina no solo hay que tener conocimientos médicos sino que «también hay que tener habilidades sociales y ser empático con el paciente. Los datos y la información se puede conseguir pero saber atender y acompañar a un paciente es difícil de aprender».

Universitario. El Hospital San Pedro se convirtió en hospital universitario en 2008 gracias a la estructura hospitalaria y de investigación biomédica que se puso en marcha con la apertura del hospital y del CIBIR. Estas son dos infraestructuras capaces de prestar el soporte necesario para esta actividad impulsada por el Gobierno de La Rioja.

Esto ha permitido incrementar la actividad formativa e investigadora del centro hospitalario que incluye a los futuros profesionales médicos, lo que permite desarrollar de forma más amplia e intensa los planes formativos para todos los estudiantes.

En concreto, existe un convenio entre la Consejería de Salud y la Universidad de Zaragoza que contempla un periodo formativo de 16 semanas de prácticas regladas e incluye el desarrollo de un programa de docencia en diferentes grados y niveles académicos. Este supone un importante estímulo hacia la investigación de los profesionales sanitarios riojanos y el incremento de la calidad asistencial originado por una formación médica más completa y enfocada a la práctica clínica.