Ayer mismo, Gylda presentó los primeros nombres de lo que será la segunda edición del Morrete Fest, el festival de la cultura LGTBIQ+ de La Rioja. También ayer, La Rioja Festival, la iniciativa del guitarrista riojano Pablo Sainz-Villegas, anunció que busca un héroe anónimo para brindarle una serenata;y el Ayuntamiento de Logroño avanzó que durante la celebración del festival Mayo Jazzea, que contará con Sílvia Pérez Cruz, ofrecerá un taller formativo.
Es solo una muestra de la amplitud del escenario musical riojano y, aunque no son los que logran mayor recaudación -el Morrete Fest es, de hecho, gratuito-, contribuyen a convertir a esta comunidad en un lugar de gran atractivo para los amantes de todo tipo de música, que el año pasado mostraron su agradecimiento engordando las taquillas.
Si bien es cierto que la venta de discos parece un hábito reservado a un puñado de románticos -el streaming representó el 87% del consumo de música el año pasado con 87 mil millones de escuchas en el conjunto de las plataformas digitales-, la música en directo no para de crecer y este tipo de eventos logró el año pasado la mayor recaudación de su historia en La Rioja. En concreto, y conforme a la información que recoge el Anuario de la Música en Vivo, publicado por la Asociación de Promotores Musicales (APM), en esta comunidad los conciertos en directo facturaron 2,7 millones de euros, cerca de un millón más que el año anterior, cuando fueron 1,6 millones, y multiplicando por cinco la cuantía de hace una década, 520.000 euros.
Gran parte de esta notable subida, de un 60%, hay que atribuírsela a la presencia de grandes estrellas del panorama internacional, como Bob Dylan en junio en Logroño a Franz Ferdinand u Offspring, en el Rock Land en Santo Domingo en julio, sin olvidar la gran atracción -más de 55.000 personas- que supuso el Holika de Calahorra. Esta crecimiento camina de manera paralela a lo sucedido en el conjunto de país, que cerró el año con una facturación de 579 millones de euros, con una subida del 26% sobre las cifras -459.2 millones- del año 2022.
Ignacio Faulín, promotor musical y un pionero en la organización de festivales en nuestro país -creó Iberpop, la génesis del festival Actual hace 40 años- argumenta que una de las razones para esta notable subida de la recaudación obedece a la normalización de la actividad después de dos duros años de pandemia -en 2020, en taquilla se dejaron 934.000 euros;1,2 millones en 2021; y 1,6 millones al año siguiente-. «El sector del espectáculo está en plena efervescencia», constata Faulín, que relaciona la evolución del espectáculo vinculado al turismo. «La gente se mueve más que nunca, buscando las sensaciones que les general los artistas que les gustan, y aprovechan su visita a La Rioja para pasar un par de días», explica el promotor musical.
Afluencia foránea. Con cuatro décadas en el espectáculo profesional, ejemplifica la importante afluencia de público de otras comunidades en sus producciones y, al respecto, relata que la mitad de las entradas vendidas para el Festival Iber Rock, que organiza el 15 de junio en La Ribera, la han adquirido rockeros de fuera de La Rioja.
Señala que esta circunstancia se repite en otros espectáculos -como las entradas del cómico Galder Varas, donde más de la mitad es público foráneo-,y considera que el margen de crecimiento en esta comunidad es limitado. «Tendría que haber algo diferenciado, con identidad propia y atractivo para el público;aquí hay casi de todo», argumenta Faulín, que recuerda que en sus comienzos, en el año 1983, Iberpop supuso algo novedoso y original. Ahora, eso sí, «si traes a alguien con evidente tirón popular, va a funcionar», reconoce el promotor, que programa en el festival Actual y organiza eventos dentro y fuera de La Rioja.
Manuel Carrasco, Melendi, Joaquín Sabina, Marea y Hombres G fueron los cinco artistas cuyas giras nacionales obtuvieron mayor recaudación;Coldplay, Harry Styles y Springsteen lo fueron en el ámbito global.