Desafíos en el horizonte

Feli Agustín
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Sindicatos y patronal plantean los retos para un año complejo: frenar la siniestralidad y un plan industrial comparten atención con la gestión óptima de los fondos europeos

Un plan industrial, una reivindicación coincidente. - Foto: Óscar Solorzano

Sindicatos y patronal coinciden en que La Rioja tiene diferentes retos por delante aunque ponen el foco en distintos aspectos. El secretario general de UGT, Jesús Izquierdo, apunta que es un año que se presenta «con luces y sombras», con un crecimiento económico más moderado, que derivará en una creación de empleo más contenida, después de un periodo óptimo, con un importante incremento de la contratación indefinida. Aconseja, para que esta situación perdure, apostar de manera «clara» por un plan industrial «que incentive los sectores productivos estratégicos». 

Para UGT es, además, prioritario abordar la reducción de la siniestralidad laboral y el tratamiento de la salud mental como un verdadero problema social. «De igual forma, se debe resolver la infrafinanciación de la Inspección de Trabajo para que se dote de recursos suficientes y sea eficaz», resalta Izquierdo, que insta  instar al Gobierno de La Rioja a la publicación inmediata de los convenios firmados el año pasado de sectores de industrias vinícolas, derivados del cemento, limpieza de edificios y restaurantes, bares y cafeterías, «cuya publicación en el BOR esperan miles de trabajadores».

Su homólogo de Comisiones Obreras, Jorge Ruano,  coincide en que la siniestralidad laboral es una lacra en términos sociales y económicos que se debe combatir. Apunta, al respecto, la existencia de una estrategia nacional, con la mayoría de las medidas contempladas «eminentemente técnicas» que deben complementarse con políticas y estrategias regionales «pegadas al terreno» y negociadas con los agentes sociales implicados.

Ruano reflexiona que se aborda el año en un contexto global complicado, aunque entiende que «contamos con fortalezas y con la ventaja» que ha supuesto la anterior legislatura en avanzar y hacer viable el cambio de paradigma de la economía española. Coincide con los analistas en que las cifras de crecimiento muestran una desaceleración de la economía española a lo largo de 2024 y menciona que el «gran desafío» para que los fondos europeos se conviertan en la palanca de transformación de la economía es reforzar la administración para que sea capaz de gestionar las cuantías y «no solo ejerciendo de ventanilla a la que ir a pedir subvenciones, sino también adoptando un rol más activo para lograr los objetivos.

El secretario general de CCOO cita también la necesidad de garantizar el derecho a una vivienda digna y asequible, la apuesta por la transición energética y ecológica, la reforma fiscal y augura un año de gran importancia para la negociación colectiva. 

«En el centro». El presidente de la FER, Jaime García Calzada, reivindica el papel de empresarios y autónomos, que  deben estar en el centro de las políticas públicas y «no en la diana», además de dignificar su figura. «Hay que fomentar el espíritu emprendedor y empresarial», afirma, al tiempo que lamenta la escasez de personal cualificado, que supone «un problema importante».

Pone el foco en el capítulo de las infraestructuras, y demanda más frecuencias ferroviarias a Madrid, «un modelo viable para el aeropuerto» y el diseño «con tiempo» de los enlaces de la autopista antes de su liberalización.

García Calzada defiende la reducción de impuestos y que el plan de choque en ADER se lleve a cabo «con celeridad», y reclama nuevas líneas de ayudas, accesibles, sencillas y ágiles, con plazos de abono mucho más reducidos.

Insiste en una demanda histórica de reducción «drástica» de la burocracia, aumentar el peso de la industria, diseñar un plan de captación de inversiones, realizar una apuesta decidida por la innovación y la tecnología y  fomentar una mayor internacionalización de la empresa riojana.

Desde la FER su presidente apela a «reorientar» los proyectos de fondos europeos para que desemboquen en propuestas viables, adaptadas a las necesidades reales de las empresas y sectores y «lleguen la economía real».